"Y había salido Isaac a meditar al campo, a la hora de la tarde; y alzando sus ojos mirò, y he aqui los camellos que venían. Rebeca tambien alzo sus ojos, y vio a Isaac, y descendio del camello" Genesis 24:63,64
Anteriormente dejamos a Rebeca preparándose para viajar a Beerseba a fin de casarse con Isaac, Trata de imaginar sus sentimientos mientras recorría a lomo de camello mas de 800 Kilómetros por senderos polvorientos. El viaje llevo muchos días, lo cual le dio abundante tiempo para pensar que se iba a casar con un hombre al cual no conocía y con quien nunca había hablado. Pero al recordar los hechos milagrosos que condujeron a su partida, sabia sin lugar a dudas que ese era el hombre para ella.
En primer lugar, estaba la firme obediencia de Abrahan a su creador que lo había llevado a enviar a Eliezer a un lugar donde se adoraba a Dios. En segundo termino, ella pensó en su oración de Eliezer, según la cual la primera muchacha que le ofrecía agua seria la escogida por Dios. En tercer lugar, su familia había sentido la conducción divina. Y en cuarto lugar, ella misma se sentía convencida de que debía ir.