miércoles, 30 de septiembre de 2015

La verdadera psicología

"Mucha paz tienen los que aman tu ley, y no hay para ellos tropiezo" Sal. 119:165.

Tener presente el concepto que destacamos ayer acerca de ti mismo y de la relación que Dios tiene contigo, de Creador-criatura, Padre-hijo, te asegura que toda concepción acerca de la psicología que no esté en armonía con la cosmovisión y los principios revelados en su Palabra no puede estar acertada y no te puede conducir por buen camino, ni aun en relación con tu salud mental. 

Toda conducta que no armonice con los principios de su Palabra necesariamente te hará daño psicológicamente, pues eres una unidad bio-psico-socio-espiritual, y no puedes separar tu vida espiritual y moral de tu salud psíquica.

martes, 29 de septiembre de 2015

Dios es el Creador de tu mente

"Porque tú formaste mis entrañas; tú me hiciste en el vientre de mi madre. Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; estoy maravillado, y mi alma lo sabe muy bien… Mi embrión vieron tus ojos, y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas que fueron luego formadas, sin faltar una de ellas" Salmo 139:13-16.

Nuestro Salmo de hoy nos dice que fuimos “formados” por Dios; por supuesto, a través de leyes, estructuras, mecanismos y procesos que él mismo estableció, y que alienta y sostiene con su poder. Y nos dice que esta creación no fue hecha con descuido, o por azar, sino que responde a una planificación: “En tu libro estaban escritas todas aquellas cosas que fueron luego formadas, sin faltar una de ellas”. 

Esta expresión es solo una forma de decir que Dios planificó toda la estructura orgánica de nuestro cuerpo (hoy hablamos de genética y de la posibilidad de “leer” los códigos genéticos, ya que en ellos se encuentra “escrita” toda la información de cómo será un individuo en su crecimiento y desarrollo, aun desde que es tan solo un cigoto minúsculo, en el vientre de su madre, desde el momento de su concepción).

lunes, 28 de septiembre de 2015

Eres un ser integral

"Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo" 1 Tesalonicenses 5:23.

Un concepto fundamental que tenemos que tener en cuenta al hablar de la psicología cristiana, y que se ve reflejado en nuestro texto bíblico de hoy, es el de la unidad indivisible del hombre; es decir, en el concepto bíblico, el hombre es un ser integral, holístico, una unidad bio-psico-socio-espiritual.

Para poder analizar los fenómenos humanos, hablamos de diferentes dimensiones de la personalidad, como lo “físico”, lo “mental”, lo “moral”, lo “espiritual”, lo “social”, 

domingo, 27 de septiembre de 2015

¿Que es el hombre?

"Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que tú formaste, digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria, y el hijo del hombre, para que lo visites? Le has hecho poco menor que los ángeles, y lo coronaste de gloria y de honra" Salmo 8:3-5.

No es novedad que desde hace casi doscientos años se ha establecido el paradigma evolucionista como la explicación totalizadora de la realidad universal y humana. 

El hombre, desde esta concepción naturalista, sería un producto del azar, de la supervivencia del más apto, y todo su comportamiento se explicaría como conductas adaptativas para poder sobrevivir, solamente que con el tiempo y la evolución de la cultura estas conductas adaptativas adquieren formas más sofisticadas. Pero, bajo este esquema, todo lo que llamamos “valores”, o “espiritual” o “moral” en el hombre n© serían sino formas camufladas, revestidas de “civilidad”, de esta lucha por sobrevivir. No existirían, por lo tanto, valores verdaderos, espirituales, sino solo instintos arcaicos que empujan al hombre en su lucha por la supervivencia.

sábado, 26 de septiembre de 2015

A Dios le interesa tu bienestar mental

"Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado" Isaías 26:3.

Dedicaremos este mes a un tema que considero necesario para la vida del cristiano: su vida psicoespiritual. No pretenderé hacer un tratado de psicología; simplemente, trataremos de articular algunos conocimientos básicos y sencillos de psicología con la luz que emana de la Palabra de Dios para esta área de la experiencia humana. Creo que esto es importante por varias razones:

viernes, 25 de septiembre de 2015

Inconsciente, neurosis y valores

"Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?Jeremías 17:9

Antes de Sigmund Freud, se creía que la conducta humana era gobernable, predecible, consciente, absolutamente voluntaria:controlable. 

Creíamos que nos conocíamos a nosotros mismos. Freud nos vino a mostrar cuán poco conocemos de los verdaderos resortes de nuestra conducta, las fuerzas inconscientes que actúan en nuestra psiquis y que, en gran medida, manejan nuestro comportamiento.

jueves, 24 de septiembre de 2015

Autoestima

"Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de si que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura" Romanos 12:3.

Una de las perturbaciones que muchos tienen, en su relación con otros y con la vida misma, es la baja autoestima. Hay quienes sienten que son poca cosa, que no valen nada, que no son suficientemente inteligentes, capaces, buenos, bellos o atractivos. Creen que no merecen o no pueden ser amados por otros, ser felices, tener una buena pareja, un buen empleo o destacarse en la sociedad. Incluso, desde el punto de vista religioso, sienten que Dios no puede amarlos, aceptarlos, aprobarlos y tener un plan especial para su vida.

miércoles, 23 de septiembre de 2015

Aceptación Incondicional

"A mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé; daré, pues, hombres por ti, y naciones por tu vida. No temas, porque yo estoy contigo" Isaías 43:4, 5.

Según Cari Rogers, el problema que interfiere en nuestra autenticidad, o congruencia, es que hay un punto en la vida en el que empezamos a dejar que la “mirada del otro” pese más en nosotros que nuestro propio fuero íntimo, porque no podemos soportar la desaprobación de los demás.

Entonces, el camino de la sanidad interna, del retorno a la autenticidad, será aprender a aceptarnos a nosotros mismos incondicionalmente y aprender a aceptar a los demás de esta manera.